La diabetes es una condición que puede autogestionarse, aunque siempre es necesario contar con profesionales médicos para que supervisen nuestro caso con cierta frecuencia, y nos ayuden a resolver dudas o cambios que debamos implementar.
Las visitas al médico pueden ser más o menos regulares en función de cada caso, pero es seguro que nos tocará acudir de vez en cuando. Aunque su obligación sea tratarnos y atendernos, debemos ser agradecidos y respetar su trabajo y el tiempo que dedican a cada paciente.
Con este objetivo, mejorar la comunicación que mantenemos con el equipo de salud, es primordial, y puede ayudar a aligerar su carga de trabajo, y a agilizar ciertas visitas y trámites. A continuación veremos algunas propuestas para mejorar la comunicación con nuestro médico.
Cómo mejorar la comunicación con los profesionales especialistas en diabetes
Mejorar la comunicación con tu equipo de salud sobre la diabetes es crucial para gestionar eficazmente la enfermedad. Aquí hay algunas estrategias que pueden ayudarte a comunicarte de manera más efectiva:
Preparación antes de las citas
- Lleva un diario de salud: Anota tus niveles de glucosa, la dieta, la actividad física y cualquier síntoma o problema que hayas tenido. Esto proporcionará a tu equipo de salud una visión clara de tu control diario.
- Haz una lista de preguntas: Antes de tu cita, anota todas las preguntas y preocupaciones que tengas para asegurarte de que no se te olvide nada durante la consulta.
Sé honesto y abierto
- Comunica tus preocupaciones y desafíos: Habla abiertamente sobre las dificultades que enfrentas en la gestión de tu diabetes, ya sean problemas con la dieta, el ejercicio, el manejo del estrés o la adherencia a la medicación.
- No ocultes información: Es importante que tu equipo de salud tenga una imagen completa y precisa de tu situación. No ocultes información por temor a ser juzgado o criticado, ya que eso puede dificultar el diagnóstico de ciertas situaciones.
Participa Activamente en las Decisiones de Tu Tratamiento
- Involúcrate en tu plan de tratamiento: Colabora con tu equipo de salud para desarrollar un plan de tratamiento que se adapte a tus necesidades y estilo de vida. Esto puede incluir la elección de medicamentos, ajustes en la dieta y el régimen de ejercicios.
- Haz preguntas sobre tus opciones: Si no entiendes algo o si tienes opciones de tratamiento, pide a tu médico que te explique las ventajas y desventajas de cada opción.
Educa y actualiza a tu equipo de salud sobre tu progreso
- Proporciona actualizaciones regulares: Informa a tu equipo de salud sobre cualquier cambio en tus síntomas, niveles de glucosa, o cualquier otro aspecto relevante de tu salud.
- Usa tecnología: Si usas aplicaciones o dispositivos para monitorear tu salud, comparte los datos con tu equipo de salud para un seguimiento más preciso.
Mejora la comprensión y comunicación médica
- Solicita explicaciones claras: Si no entiendes términos médicos o las instrucciones de tu médico, pide que te lo expliquen de una manera más comprensible. Es importante no salir con dudas de la consulta.
- Usa materiales educativos: Pide folletos, recursos en línea o referencias a cursos educativos que te ayuden a entender mejor tu diabetes y cómo gestionarla.
Establece una relación de confianza
- Construye una relación de confianza: Es fundamental sentirte cómodo y confiado con tu equipo de salud. Si sientes que no puedes comunicarte efectivamente con ellos, considera buscar una segunda opinión o cambiar de proveedor de salud.
- Respeto mutuo: Trabaja en un ambiente de respeto mutuo donde tus preocupaciones y opiniones sean valoradas y consideradas en las decisiones de tratamiento.
Planifica las visitas de seguimiento
- Asegúrate de tener citas regulares: Las visitas regulares permiten un seguimiento continuo y ajustes necesarios en tu tratamiento.
- Define los objetivos y próximos pasos: Al final de cada cita, asegúrate de entender los objetivos a corto y largo plazo y los próximos pasos en tu plan de tratamiento.
Las visitas a consulta pueden ser momentos ágiles, donde la información fluya en ambas direcciones, y que permitan mejorar tanto el control de la diabetes, como el conocimiento que se tiene sobre ella.
Respetar el tiempo que los profesionales pueden dedicarnos, y facilitar su tarea, es importante si queremos que estas visitas sean productivas para ambas partes. Esperamos que estas recomendaciones os sean de utilidad en vuestra próxima consulta.