La etiqueta de un alimento debe contener obligatoriamente la información nutricional
referente al valor energético, es decir, las calorías que aporta, las cantidades de grasas, ácidos grasos saturados, hidratos de carbono, azúcares, proteínas y sal.
Por ejemplo, en el caso del calcio, un yogur contiene 150 mg de calcio. Si la ingesta de referencia para un adulto es de 1000 mg al día, representa un 15% de la ingesta de referencia y, por lo tanto, se puede incluir en la etiqueta.
Obligatorio que figuren los ingredientes
En la etiqueta deben figurar todos los ingredientes presentes en el producto, destacando aquellos que causen alergias o intolerancias, entre los cuales hay catorce que, obligatoriamente, deben ser declarados (gluten, huevos, soja, cacahuetes, apio, mostaza…).
También debe figurar la cantidad neta del alimento (sin el envase, sin agua cuando
se trata de conservas…), el país de origen, el nombre o la razón social de la empresa
alimentaria, la fecha de duración mínima o la fecha de caducidad y las condiciones
especiales de conservación y/o de utilización.
La información facilitada debe ser precisa, clara y de fácil lectura y comprensión para el consumidor
Qué son las declaraciones en la etiqueta del alimento
Una declaración es cualquier mensaje o representación pictórica, gráfica o simbólica, no
obligatorio de acuerdo con la legislación comunitaria o nacional que afirme, sugiera o dé
a entender que un alimento posee unas características específicas.
En ningún caso pueden inducir a error sobre las características del alimento, ni tampoco pueden atribuir al alimento efectos o propiedades que no posee.
Tipos de declaraciones
Declaraciones nutricionales: aquellas que hacen referencia a propiedades beneficiosas específicas relacionadas con su aporte de calorías o de los nutrientes u otras sustancias.
Por ejemplo: “light”, “sin azúcares añadidos”, “fuente de fibra”.
Declaración de propiedades saludables: aquellas que relacionan una categoría de alimentos, un alimento o uno de sus constituyentes y la salud. Por ejemplo: “los fitoesteroles contribuyen a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo”, “la vitamina C contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario”
Declaración de reducción de riesgo de enfermedad (subgrupo de declaraciones
de propiedades saludables): aquellas declaraciones nutricionales que sugieren o dan a entender que el consumo de una categoría de alimentos, un alimento o uno de sus constituyentes reduce significativamente un factor de riesgo de aparición de una enfermedad humana. Por ejemplo: “se ha demostrado que los fitoesteroles disminuyen la colesterolemia”.
– Colesterol: la tasa elevada constituye un factor de riesgo en el desarrollo de cardiopatías coronarias. Debe informarse al consumidor de que el efecto beneficioso se
obtiene con una ingesta diaria de 1,5 a 3 g de fitoesteroles.
– Calcio: contribuye a reducir la desmineralización ósea en mujeres postmenopáusicas.
Una densidad mineral ósea baja es un factor de riesgo de fracturas óseas osteoporóticas.
Solo se puede utilizar en alimentos que aporten al menos 400 mg de calcio por porción cuantificada. Se informará al consumidor de que la declaración está dirigida específicamente a las mujeres a partir de 50 años y de que el efecto beneficioso se
obtiene con una ingesta diaria de al menos 1200 mg de calcio de todas las fuentes.
Las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables se incluyen en
un registro comunitario, donde figuran las autorizadas y sus condiciones de uso,
además de las rechazadas y los motivos del rechazo.
Declaraciones relacionadas con el contenido de azúcares
En el caso de los azúcares, podemos indentificar los mensajes:
- Bajo contenido en azúcares: 5g o menos de azúcares por cada 100g en el caso de alimentos sólidos. 2,5g o menos de azúcares por 100ml en el caso de alimentos líquidos.
- Sin azúcares añadidos: 0,5 g o menos de azúcares por 100 g o 100 ml de alimento. Para comprobar que el alimento cumple lo que indica la declaración nutricional
debemos identificar en la información nutricional los hidratos de carbono que sean azúcares. Un alimento “sin azúcares añadidos” se refiere a que no se ha añadido ningún ingrediente definido, como azúcar añadido u otro alimento con sabor dulce. Aun así, el alimento puede contener otros hidratos de carbono, como harinas, cereales enteros o azúcares naturales (fructosa, lactosa…). - Contiene azúcares naturalmente presentes: Se refiere a que solo contiene
los azúcares intrínsecos o naturales del alimento; por ejemplo, un zumo de fruta natural.
Cómo identificar los azúcares añadidos y edulcorantes
Es importante diferenciar entre los azúcares intrínsecos o naturales del alimento, es decir, que forman parte de su estructura natural (la lactosa en la leche, la fructosa en la fruta) y los azúcares añadidos, que son aquellos que se han añadido a los alimentos o bebidas durante su fabricación, cocción o envasado.
- Edulcorantes bajos en calorías o sin calorías: Son aditivos alimentarios que se añaden a los alimentos en lugar del azúcar para aportar sabor dulce. Si los comparamos con los azúcares aportan menos o nada de calorías y tienen un efecto bajo en los niveles de glucosa en la sangre, de modo que pueden ser adecuados para personas que necesitan controlar el peso corporal o personas con diabetes. Aun así, es recomendable moderar su consumo o evitarlos siempre que sea posible, ya que algunos estudios sugieren que pueden aumentar la preferencia por el sabor dulce y promover el consumo de alimentos con alto contenido en azúcares.
- Edulcorantes permitidos en alimentos y bebidas por la Unión Europea: Actualmente hay diecinueve edulcorantes bajos en calorías o sin calorías permitidos que han sido evaluados y autorizados por los organismos reguladores internacionales. Los podemos identificar en la lista de ingredientes con una letra E seguida de tres números. Los más utilizados son:
Declaraciones relacionadas con el contenido de calorías
Un alimento bajo en calorías o light puede contener azúcares añadidos, por lo que siempre recomendamos comprobar la lista de ingredientes.
- Los alimentos bajos en calorías son aquellos que contienen 40kcal o menos por 100g en alimentos sólidos; o 20kcal o menos por 100ml en alimentos líquidos.
- Los productos light o con valores reducidos de calorías, son aquellos en los que el valor energético se reduce al menos en un 30% del valor calórico de su versión normal.
Declaraciones relacionadas con el contenido de la lactosa
Los alimentos «sin lactosa» y «con bajo contenido en lactosa» no son aptos para personas con alergia a la proteína de la leche o con galactosemia.
- Sin lactosa: Aquellos alimentos que acrediten ausencia de lactosa siguiendo las analíticas más sensibles al estado actual de la ciencia. Es decir, inferior al 0,01 de lactosa.
- bajo contenido en lactosa: Son aquellos alimentos con contenido en lactosa residuales medibles, y que se sitúan en generalmente por debajo del 1%.
Declaraciones relacionadas con el contenido del gluten
Para identificar la presencia de gluten en la lista de ingredientes se indicará y destacará claramente el nombre del cereal con gluten (trigo, espelta, centeno, avena o cebada) o la palabra gluten. El gluten como ingrediente añadido se identifica con el tipo de cereal del que procede. Por ejemplo, gluten (trigo) o dextrina (gluten de trigo o que contiene gluten de trigo).
- Sin gluten: Solo podrá utilizarse si los alimentos tal como se venden al consumidor final no contienen más de 20mg de gluten por cada kg de alimento. Esta indicación puede figurar en alimentos elaborados o procesados específicamente para reducir el contenido de gluten (de uno o varios ingredientes), o para sustituir los ingredientes que contienen gluten por otros que están exentos de gluten de forma natural.
- Muy bajo en gluten: Solo podrá utilizarse cuando alimentos que consistan en trigo, centeno, cebada, avena, sus variedades híbridas o ingredientes hechos a partir de estos cereales, se hayan elaborado específicamente para reducir el contenido de gluten de uno o varios ingredientes que contienen gluten y no contengan más de 100 mg de gluten por kg de alimento tal como se vende al consumidor final.
Cómo identificar en la lista de ingredientes los alimentos ultraprocesados
El “procesado de los alimentos” es el proceso tecnológico que la industria alimentaria aplica a los alimentos para mejorar su conservación, modificar su sabor o textura, o añadir ingredientes a su composición. La cantidad y la clase de ingredientes de la etiqueta alimentaria nos permiten identificar los llamados “alimentos ultraprocesados”.
Composición de los alimentos ultraprocesados
Están compuestos en gran parte o por completo de sustancias extraídas de los alimentos y de aditivos. Son sometidos a procesos industriales complejos para crear productos listos para comer, beber o solo calentar, y son presentados en envases muy atractivos visualmente. Debido al gran número de procesos industriales utilizados en su fabricación
refinamiento fraccionamiento hidrogenación extrusión… Estos alimentos pierden su estructura original absorbiéndose fácilmente en el intestino y provocando un aumento rápido de la glucosa y de insulina en sangre.
También hay alimentos procesados saludables, como pueden ser conservas de pescado, legumbres, vegetales, frutos secos o el aceite de oliva. Aunque la mayoría de productos que encontramos en el supermercado son ultraprocesados.
En los ultraprocesados se puede identificar un mínimo de 5 ingredientes. Normalmente hay muchos más, entre los que encontramos azúcares, grasas, sal, añadidos y específicamente aditivos destinados a imitar el sabor, olor o textura de alimentos naturales. Esta composición de ingredientes hace que presenten un alto contenido en calorías “vacías”, es decir, que aportan energía y ningún nutriente de calidad como fibra, cereal entero, vitaminas, minerales… Son altamente sabrosos, estimulando el apetito aún más por este tipo de alimentos.
Es importante limitar al máximo o evitar el consumo de este tipo de productos porque se ha demostrado en estudios científicos que su elevada ingesta se relaciona con el exceso de peso, la obesidad, la diabetes tipo 2 o las enfermedades del corazón.
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