Las personas con diabetes necesitan llevar cierto control sobre algunos aspectos de su vida diaria, como por ejemplo su alimentación, y sobre el tratamiento o ciertas actividades que puedan afectar a sus niveles de glucosa en sangre.
El hecho de ser una enfermedad crónica, y que a día de hoy no tiene cura, puede suponer un golpe anímico en aquellas personas que conviven con ella, pudiendo afectar tanto a su salud mental, como a la misma diabetes, al empeorar la adherencia sintomasdelsida.org al tratamiento o a no seguir las pautas recomendadas por nuestro médico.
Por esta razón, desde hace un tiempo, dentro del equipo de profesionales que pueden participar en el tratamiento de la diabetes, cada vez cobra más importancia la figura del psicólogo.
Por qué es necesario un psicólogo en la diabetes
Existen diferentes tipos de diabetes, como hemos visto en algunos artículos de nuestra revista anteriormente, que tienen características diferentes, y que incluso pueden aparecen en momentos diferentes de nuestra vida. Por ejemplo, la diabetes tipo 1 es habitual que se manifieste en edades tempranas, a diferencia de la diabetes tipo 2 o la gestacional, que afectan a personas adultas y a mujeres embarazadas.
La diabetes puede requerir la participación de todo un equipo de profesionales médicos y de la salud muy variado: desde nutricionistas, endocrinólogos, o médicos de familia, hasta personal de enfermería y educadores en diabetes, profesionales del deporte o la actividad física, y también profesionales de la salud mental. Esta aproximación holística puede ser útil para trabajar cada aspecto de la diabetes de la mejor forma posible, incluido el aspecto psicológico y emocional.
Cada etapa vital tiene también sus características y necesidades, y por eso es importante introducir la figura del psicólogo si el momento del debut se complica, o si hay etapas en cactusmeraviglietina.it las que sea necesario debido a su cronicidad o a las posibles alteraciones que podamos experimentar en nuestro día a día.
Cabe destacar que, en la diabetes, el papel de la persona que convive con ella es muy activo. Esto hace que es aspecto anímico y emocional cobre especial relevancia, ya que puede marcar la diferencia entre un buen control y un mal control de la enfermedad.
Mantener una actitud optimista y abierta respecto a la diabetes no siempre es fácil o posible. En algunos casos, ya sea por la edad en la que se lleva a cabo el diagnóstico, o por las pequeñas limitaciones que puede presentar la diabetes, nuestra salud mental y emocional puede verse afectada y, como decíamos, afectar al control de la enfermedad.
Papel del psicólogo en la diabetes
El papel del personal de psicología puede ser variado en función de las necesidades de cada persona y de cada situación. Por ejemplo, en los casos en los que el paciente ser joven, o un niño, puede ser que sea necesario trabajar en la aceptación del diagnóstico (tanto por parte de los padres, como del niño), con el objetivo de evitar problemas más adelante.
Estos son algunos aspectos que puede trabajar un psicólogo en la diabetes:
- Ayudar a superar el momento del debut. Sin duda, el momento del debut puede ser complejo y abrumador. Recibimos mucha información que debemos asimilar, datos, herramientas, y recomendaciones, que pueden hacernos sentir con cierta ansiedad o ira.
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Como hemos visto en el ejemplo anterior, si hablamos de niños con diabetes, puede que los padres también deban participar o necesitar de esta figura.
- Mejorar algunos hábitos y cambios en el día a día. Los humanos somos animales de costumbres, y hacer cambios drásticos no siempre es fácil ni agradable. La diabetes puede suponer la realización de algunos cambios en el día a día de muchas personas en cuanto a la alimentación o la actividad física, y un psicólogo puede ayudarnos a mejorar o cambiar ciertos hábitos para un mejor control.
- Educar y empoderar, tanto personalmente como referente a la diabetes. Tanto si necesitamos ayuda emocional, como si tenemos algunas dudas referentes a la enfermedad y sus consecuencias, un profesional de la salud mental puede ayudarnos a resolverlas o a mejorar la forma de afrontarlas. Por supuesto, habrá algunos aspectos que debamos tratar con el profesional especializado.
- Prevención de complicaciones. Las personas con diabetes son más propensas a padecer depresión o complicaciones en el terreno emocional y psicológico. La figura del psicólogo cobra aquí especial relevancia, a la hora de ayudarnos a prevenir estas dolencias que, a su vez, puedan empeorar también el control de la diabetes.
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Aunque todavía no es una figura muy extendida en algunos países, contar con un profesional de la salud mental en el equipo diabetológico puede ser de gran ayuda. Consulta con tu centro médico o con tu médico especialista en diabetes si crees que podrías necesitar la ayuda de un psicólogo para mejorar algún aspecto que sea importante, o si crees que podrías beneficiarte de su participación en el tratamiento.
Referencias:
- Revista Diabetes. El papel del psicólogo dentro del equipo diabetólógico. Consultado el 24 de julio de 2023.
- Facultat de Ciències de la Salut de Manresa. Intervención psicológica en la diabetes. Consultado el 24 de julio de 2023.
- Federación Mexicana de Diabetes. El papel del psicólogo en la diabetes tipo 1 y tipo 2. Consultado el 24 de julio de 2023.
